El P. fray Benito Macotela, fraile de San Esteban, morador en el convento de la Encarnación de Trujillo, recibe el poder del convento de San Esteban en sustitución que le hace El P. Martín Ramos, procurador de dicho convento, por cuyo poder hace la escritura de arrendamiento de la heredad llamada del Pinarejuelo (Pinarejo) término de Trujillo, a Gonzalo Bejarano, vecino de Plasenzuela, por 6 años al precio de 8.000 mrs. cada año. Dada en Plasenzuela, 22/09/1602, ante Dieo de Trejo, escribano.
En dicha escritura se traslada el poder general del convento de San Esteban, en Salamnca, a 25/02/1602, ante Diego López, escribano (ver área de notas, nombres de frailes), y la de sustitución que cede el P. Martín Ramos al P. Bentio Macotela, en Salamanca, 11/09/1602, ante Diego López .