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Según dice el autor en la p. 14 es una traslado fiel del antiguo, que ya estaba destruido por la carcoma [luego tenía tapas de madera] por lo que se decidió hacer este manuscrito. Se divide en 8 capítulos, que llevan los siguientes títulos: "De lo que debe observar el P. Celador en mesa segunda", "En qué tiempos y a qué horas debe tocar al silencio", "De la obligación de cerra las puertas del convento", "De la obligación de avisar a Consejo y fiestas de concurso", "A quienes debe avisar para funciones de monjas", "De las fiestas y demás funciones en la universidad", "De algunas otras obligaciones que tiene el P. Celador". Estos capítulos, dice el autor de este manuscrito, pp. 11-12, que son obligaciones y cargos del P. Celador según la costumbre de este convento y según se hallan en manuscritos antiguos. Pero el P. Celador tiene sus privilegios y exenciones, que van en el capítulo 8 y último, titulado: "De las dispensas privilegios y exenciones de que disfruta el P. Celador", se señalan algunas : dispensado de todo coro, incluso en las fiestas más clásicas; dispensa de maitines a media noche (por tener el cargo que antes tenían dos celadores); dispensado de velar a los moribundos y muertos y de hacer vela al Santísimo, que solo le toca mientra mesa primera; tiene también una misa libre más que el resto de sacerdotes, aunque esto por voluntad de Maestros Priores, pero desde que es uno solo el celador siempre la tuvo...
Al final se añade: Honras del Sr. D. Fernando VII, Los PP. Dominicos tienen que ir a la capilla del Cristo de las Batallas, a decir la vigilia y misa y concluida ir al túmulo a decir una responso rezado.